Via Crucis
La guerra de Ucrania ha estado entre las meditaciones del papa en el Via Crucis de Roma.
En Roma, este viernes santo, el papa oficia el Via Crucis en el coliseo romano, donde no se pudo celebrar el año pasado debido a la pandemia. Roma recupera el esplendor de su Semana Santa, una de las épocas del año más importantes para la capital Italiana. La guerra de Ucrania está entre las meditaciones del papa Francisco en este Via Crucis.
El de hoy a causa de la guerra en Ucrania es el Via Crucis más doloroso de los últimos 80 años y el primero que vuelve a celebrarse en el Coliseo desde 2020 por la pandemia. El papa ha pedido que escriban los textos de las meditaciones familias muy diversas entre sí: numerosas, con hijos discapacitados u adoptados, emigrantes y refugiados. La penúltima meditación ha sido escrita por dos mujeres, una rusa y otra ucraniana, pero el Vaticano de desmentido que se trate de identificar a agresores con agredidos, sino de expresar un gesto de reconciliación entre dos países hermanos.
La pasión de Cristo en la basílica vaticana
Este viernes santo, el pontífice también ha presidido la celebración de la Pasión de Cristo en la basílica de San Pedro del Vaticano. En años anteriores, el papa se tumbaba sobre una alfombra extendida en el suelo de la basílica para rezar como es tradición, pero este año no lo ha hecho. De 85 años, Francisco se ha visto aquejado en los últimos tiempos de unos problemas en la rodilla.
El papa accedió al templo en procesión y, tras llegar ante el altar mayor con un leve cojeo y sin báculo, rezó de pie y en silencio ante la tumba de Pedro, para luego sentarse en un sillón. La Liturgia del Viernes Santo conmemora el martirio y muerte de Jseucristo. Además, es la única del año en la que no hay consagración, aunque sí comunión