EN MEDIO DE LAS REVELACIONES SOBRE ABUSOS SEXUALES
El Papa Francisco ha aceptado la dimisión del obispo estadounidense Michael J. Bransfield, quien en el pasado fue acusado de abusos sexuales a menores en la diócesis de Filadelfia (EEUU).
En un breve comunicado, el Vaticano informó de que "Francisco ha aceptado la renuncia al gobierno pastoral de la diócesis de Wheeling-Charleston presentada por monseñor Michael J. Bransfield".
Al mismo tiempo, el Papa ha nombrado administrador apostólico sede vacante, es decir, en espera del nombramiento de un nuevo obispo, a William Edward Lori, arzobispo de Baltimore.
La nota del Vaticano no da más precisiones de esta dimisión, que se produce en medio de la vorágine de revelaciones sobre abusos sexuales a menores por parte de miembros del clero en distintos países. Bransfield, que comenzó su carrera como sacerdote en la archidiócesis de Filadelfia, fue nombrado obispo de Wheeling-Charleston en 2005.
En 2012, en el juicio a otros clérigos de Filadelfia fue acusado de haber abusado sexualmente de diez niños a finales de la década de los 70 y principios de los 80, y luego relacionado con otros supuestos abusos, aunque él ha negado las acusaciones.