FALLÓ UNO DE LOS MOTORES
Un avión de línea regular de la compañía aérea escandinava SAS, en el que viajaban los príncipes herederos del trono de Noruega, se vio obligado a realizar un aterrizaje de emergencia en el aeropuerto de Copenhague.
Un portavoz de SAS comunicó que el aterrizaje forzoso, en el que no se produjeron heridos, se hizo poco después de que el aparato despegara con destino a Oslo y se viese forzado a retornar al aeropuerto Kastrup de Copenhague al fallar uno de sus motores. Añadió que el fallo del motor provocó también una humareda en la cabina, aunque la maniobra de tomar tierra se desarrolló con normalidad y sin problemas.
Nada más ser evacuada la nave, la princesa Mette-Marit envió un mensaje a sus conocidos a través de la red de twitter en el que comunicaba: "OK, mi mañana ha resultado un poco mas emocionante de lo esperado. ¡Puh!". Asimismo escribía en su teléfono inteligente: "Sigo sin superar el miedo a volar", a la vez que enviaba una fotografía del avión tras su aterrizaje en Copenhague.
El príncipe Haakon de Noruega y su esposa Mette-Marit regresaban a Oslo tras asistir a la fiesta del 40 cumpleaños de la princesa danesa Mary y se espera que retornen en otro avión de la compañía SAS.