FUE UNO DE LOS CENTROS CULTURALES MÁS IMPORTANTES
El director general de Antigüedades y Museos de Siria, Maamún Abdelkarim, alertó de que si el grupo Estado Islámico (IS) continúa su destrucción, el sitio arqueológico de Palmira podría desaparecer en tres o cuatro meses. "Esto es una batalla cultural no política, necesitamos la ayuda de la comunidad internacional", señaló Abdelkarim en una conversación telefónica con Efe.
Los extremistas destruyeron el Arco del Triunfo, de unos 2.000 años de antigüedad, de Palmira, incluida en la lista del Patrimonio Mundial de la Unesco. Según Abdelkarim, lo volaron con artefactos explosivos y el arco quedó destruido totalmente.
El responsable sirio expresó su preocupación por el futuro del lugar porque el IS "ya no está destruyendo, movido por su ideología, piezas con un significado religioso, sino que está atacando construcciones civiles".
Los yihadistas arrebataron a las fuerzas del Gobierno de Damasco el control de Palmira el 20 de mayo pasado. Desde entonces, ha estado dinamitando tesoros arqueológicos de la población como el templo de Baal o tres emblemáticas torres funerarias.
Palmira fue en los siglos I y II d.C. uno de los centros culturales más importantes del mundo antiguo y punto de encuentro de las caravanas en la Ruta de la Seda, que atravesaban el árido desierto del centro de Siria. Antes del inicio de la contienda, en marzo de 2011, sus ruinas eran una de las principales atracciones turísticas del país y de la región.