Países Bajos
El Gobierno de Mark Rutte ha explicado que el confinamiento estricto se mantendrá hasta el 14 de enero. La decisión viene motivada por el avance de la variante ómicron.
Países Bajos ha decretado el confinamiento estricto de la población por el avance de la variante ómicron del coronavirus. El confinamiento entra en vigor este domingo y se mantendrá en vigor hasta el 14 de enero.
Según ha expresado el primer ministro del país, Mark Rutte, en una rueda de prensa, se va a cerrar toda la actividad no esencial como tiendas, bares, restaurantes y otros lugares públicos. Además, colegios y universidades también van a cerrar. La decisión se ha tomado tras una reunión de urgencia en la que han estudiado las recomendaciones de los asesores sanitarios.
Se mantendrá la actividad esencial y solo permanecerán abiertas las tiendas imprescindibles, como supermercados, farmacias, gasolineras y los servicios mínimos. Comercios, restaurantes, cines, teatros o gimnasios, deberán cerrar sus puertas casi un mes. En su comparecencia, Rutte ha explicado que esta decisión "inevitable debido a la quinta ola causada por la variante ómicron que se está acercando".
De manera general un máximo de dos invitados por hogar al día, pero con motivo de las fiestas de Navidad se hará una excepción y se aumentará el número hasta 4 las personas invitadas en casa durante los días de Nochebuena, Navidad y San Esteban (26 de diciembre) y Nochevieja.
Hasta ahora, en Países Bajos estaba el denominado "confinamiento nocturno", un toque de queda, que incluía el cierre de la actividad no esencial a partir de las 17 horas y que se introdujo a finales del mes pasado. Ahora, el confinamiento estricto sustituye a esta medida.
En las últimas horas, el Instituto Nacional Holandés de Salud Pública 14.742 nuevos contagios y desde el viernes más de 200 personas han sido hospitalizadas. En total, desde que empezó la pandemia el país ha alcanzado los 2,9 millones de casos de coronavirus y más de 20.000 fallecimientos.