CUESTA MÁS DE 10.000 EUROS
Un niño chino de tres años se encuentra a la espera de recibir atención médica después de que se bebiera accidentalmente concentrado de ácido sulfúrico.
Los acontecimientos ocurrieron el la provincia de Guandong, al su de China. La madre del niñó ha declarado que dejó al pequeño jugando fuera, como hace habitualmente, pero minutos después el menor entró dentro de casa llorando y echando espuma por la boca.
Al parecer, y según los testimonios de otros niños que se encontraban jugando cerca del pequeño, este bebió de una botella que encontró en el suelo y que contenía concentrado de ácido sulfúrico, lo que le propició graves quemaduras en la garganta y el cuello.
El pequeño fue trasladado inmediatamente a los servicios hospitalarios más cercanos.
"No puede masticar ni tragar. La leche y la medicación se le administran a través de un tubo en el estómago. Su boca está totalmente quemada", ha declarado la madre.
Según el hospital, el niño sufre graves lesiones en el esófago, con lo que es incluso difícil tragar saliva o ingerir cualquier tipo de bebida. Aún estamos analizando la gravedad de los daños en el esófago a través de un gastroscopio", ha afirmado Yang Min, director adjunto del departamento de gastroenterología del hospital.
El tratamiento médico cuesta cerca de 80.000 yuanes, unos 10.500 euros, con lo que la familia busca recaudar suficiente dinero para cubrir parte de los gastos médicos al no poseer recursos para pagar la cura.