SE HA ABIERTO UN GRAN DEBATE SOBRE LA DECISIÓN
Julianna Snow, de Portland (Oregón), tiene cinco años y lucha contra la enfermedad de Charcot-Marie-Tooth, un trastorno neurodegenerativo que ha hecho su vida muy complicada.
Sus pulmones son tan débiles que un simple resfriado le podría causar una neumonía mortal. Los médicos consideran que sería muy difícil salvarla en estas condiciones y que además terminaría sedada y con muy poca calidad de vida. Seguir en el hospital significa tratamientos dolorosos y estancias hospitalarias largas que no asegurarían una recuperación completa, dijeron sus padres según recoge el diario Daily News.
Los padres de Julianna le preguntaron si quería ir al hospital la próxima vez que enfermara peligrosamente o prefería ir al cielo. Le contaron que allí podría correr y jugar, pero que no estarían con ella ni ellos ni su hermano Alex, de seis años. Julianna contestó que no quería volver al hospital, que ella quería ir al cielo.
La madre de la pequeña, Michelle Moore, decidió escribir un blog para buscar ayuda, donde se ha abierto un gran debate sobre su decisión. “A veces es un acto de amor no hacer todo para prolongar la vida y centrarse en dar a nuestra hija la vida más bonita posible durante el tiempo que se nos permita. Mi hija me decía que pasar más tiempo en casa con su familia valía más la pena por todo el dolor que sentía en el hospital”, comenta la madre en su blog personal.