EL MINISTERIO DEL INTERIOR RECONOCE EL ERROR
El padre de un niño de cuatro años condenado a cadena perpetua por asesinato y participar en disturbios, ha pedido este domingo a las autoridades de Egipto que reconozcan su error y revoquen la sentencia.
Un tribunal militar condenó a cadena perpetua la semana pasada a Ahmed Mansur, de cuatro años de edad, y otras 116 personas, por unos disturbios registrados en la capital, El Cairo, durante unas protestas contra el golpe de Estado.
El padre ha relatado en un programa de televisión que la Policía entró en su vivienda en enero de 2014 preguntando por Ahmed y, después de ver que era un niño de dos años de edad, se lo llevo a él, manteniéndole cuatro meses encarcelado hasta el inicio del juicio.
Debido a que no pudo pagar un abogado, no fue hasta el momento en el que estuvo ante el juez cuando se dieron cuenta de que no era Ahmed, pero a pesar de contar con el certificado de nacimiento, el niño fue condenado. El padre de Ahmed, Eid Sayed, ha asegurado que se produjo un problema durante las investigaciones, agregando que un hombre que se llamaba igual que el niño era sospechoso de participar en los disturbios.
Por su parte, el portavoz del Ministerio del Interior, Abu Bakr Abdelkarim, ha reconocido un error en el proceso, expresando además su sorpresa ante el hecho de que el padre de Ahmed permaneciera cuatro meses detenido.
Asimismo, ha dicho que es uno de los tíos de Ahmed el que está en busca y captura, si bien la madre del niño ha recalcado que en ningún momento se les ha preguntado por él durante las investigaciones. "Puedes ir a casa, nadie se acercará a ti ni a tu hijo", ha manifestado Abdelkarim. "Los nombres serán corregidos", ha remachado, según ha informado el diario local 'Al Ahram'.
La denuncia sobre la situación supone un nuevo caso que refleja los fallos en los juicios masivos llevados a cabo tras el golpe de Estado de Abdelfatá al Sisi en 2013. Desde entonces, miles de personas han sido condenadas a muerte o cadena perpetua en procesos criticados internacionalmente.