una ventana de la cabina de pasajeros
Un vuelo de la compañía aérea estadounidense Southwest Airlines ha realizado un aterrizaje de emergencia después de que se rompiera una de las ventanas de la cabina de pasajeros, apenas unas semanas después de que la misma aerolínea sufriera otro accidente similar. El vuelo 957, que despegó del aeropuerto Midway de Chicago (Illinois) con destino a Newark (Nueva Jersey), fue desviado a Cleveland (Ohio) tras el incidente, en el que no resultó nadie herido. Una portavoz de Southwest dijo que se tomó la decisión de desviar el avión "para la revisión de mantenimiento de una de las múltiples capas de un panel de ventana".
"El vuelo aterrizó sin incidentes en Cleveland y el avión ha sido retirado del servicio para su revisión de mantenimiento", agregó el portavoz, quien indicó además que los empleados de la aerolínea "están trabajando diligentemente para dar cabida a los 76 clientes en un nuevo avión a Newark".
En una declaración posterior, la aerolínea dijo que la cabina mantuvo la presión "ya que hay múltiples capas de paneles en cada ventana" y que técnicamente no se realizó un aterrizaje de emergencia. Las imágenes publicadas en Twitter por los pasajeros muestran varias grietas en una de las ventanas del Boeing 737-700.
A finales del mes pasado, un avión de Southwest Airlines que cubría la ruta entre las ciudades estadounidenses de Nueva York y Dallas se vio obligado a realizar un aterrizaje de emergencia en Filadelfia, después de que estallase su motor izquierdo en pleno vuelo.
El fallo técnico provocó la muerte de una pasajera que viajaba junto a una ventanilla que resultó rota al ser golpeada por una pieza del motor, y varios más resultaron heridos sin gravedad. Con motivo de aquel episodio, la compañía canceló decenas de vuelos para realizar revisiones más exhaustiva de sus motores.