Coronavirus
El director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, expresó este martes su esperanza en que se consiga una vacuna contra el coronavirus a finales de este año, pese a que expertos del organismo señalaron con anterioridad que quizá hubiera que esperar a mediados de 2021. "Necesitamos vacunas y hay esperanzas de que a finales de este año podamos tener una. Invertir en ellas mientras usamos las herramientas que tenemos ya a mano es importante para tener mejores resultados", señaló Tedros al cierre de la reunión del Comité Ejecutivo de la OMS, formado por expertos de 34 Estados miembros.
El pasado mes, la jefa de científicos de la OMS, Soumya Swaminathan, advirtió de que no se espera que las posibles vacunas contra el coronavirus estén disponibles para la población general antes de dos años, aunque los primeros grupos de riesgo podrían ser inmunizados a mediados de 2021. Al final de la reunión de dos días, centrada totalmente en la lucha contra la pandemia, Tedros concluyó que "aunque aún hay áreas desconocidas, ahora sabemos más del virus" causante de la COVID-19.
Lo más importante ahora, aseguró, es usar las herramientas que se tienen actualmente, a falta de vacunas: medidas de prevención e higiene, tratamientos, diagnóstico lo más rápido posible y rastreo de contactos. "Muchos países han mostrado que con las herramientas actuales se puede suprimir y controlar la pandemia, aunque al mismo tiempo y tenemos que invertir en nuevas tecnologías", señaló en alusión a posibles vacunas y mejores tratamientos de casos graves.
El experto etíope aseguró que "el compromiso político será crucial" en la lucha contra la pandemia e insistió en una solidaridad internacional que "debe empezar con la unidad nacional" frente al coronavirus.
El lunes, el director de emergencias sanitarias de la OMS, Mike Ryan, señaló al inicio de las reuniones del Comité Ejecutivo que alrededor del 10% de la población mundial puede haber contraído el coronavirus SARS-CoV-2, causante de la COVID-19, aunque muchos de ellos sin mostrar síntomas. Ello supondría más de 700 millones de personas, frente a los 35 millones de casos confirmados que se han reportado desde enero.