FINAL FELIZ
Su voz brillante y clara sonaba muchos días mezclándose con el ruido de los vagones del metro. Ese lugar donde tantas veces se refugió para dormir sobre un cartón. Hasta que un policía de los Ángeles la grabó y lo subió a redes sociales. Ahora ha transcendido lo dura que había sido su vida.
Emily Zamourka, de 52 años, es rusa y llegó a Estados Unidos buscando demostrar su talento. Lo hacía tocando el violín por las calles, pero un ladrón se lo robó y se lo rompió. Después, se fracturó la muñeca y tuvo que dejar de tocar. Fue entonces cuando dejó de tener ingresos y fue desalojada de su casa de alquiler, pasando a ser una indigente más en las calles de Los Ángeles.
Hasta que su vídeo cantando se hizo viral. Ahora, el productor musical Joel Diamond le ha ofrecido un importante contrato para grabar su propio disco que se llamará "Paradise". Emily no deja de agradecerle al policía que le ha cambiado la vida, ese que le demostró que hasta el más humilde tiene su ángel de la guarda.