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Nueva York registra un positivo por polio, el primer caso en Estados Unidos desde el año 2008

Estados Unidos ha comunicado este jueves que un hombre residente en el condado de Rockland (Nueva York) padece polio, una enfermedad que no se daba en el país desde hace 14 años.

Tras 14 años sin contagios de polio, la enfermedad vuelve a Estados Unidos. Pixabay

Estados Unidos vive su primer caso de polio desde hace más de una década. Según indican varios medios americanos, entre ellos el diario Telemundo47, un hombre residente en el condado de Rockland, en el estado de Nueva York, ha sido diagnosticado con la enfermedad, que llevaba 14 años erradicada del país. No se tenía ninguna noticia de posibles contagios en el país desde el año 2008, cuando Estados Unidos ya comunicó oficialmente que la polio había desaparecido del país.

Esta enfermedad es común en los países de Oriente Próximo y gran parte de África, donde suele propagarse con gran velocidad. Pese a que la OMS la dio por erradicada en este ultimo continente en agosto del año 2020, han aparecido unos pocos casos en el último año en Madagascar, lo cual hace temer que pueda regresar y volver a causar un brote como en años anteriores. Favorece el hecho de que Madagascar sea una isla, lo cual hace que ese temor sea más pequeño.

En Europa, no se registra ningún caso de polio desde hace 20 años. Fue en junio de 2002 cuando la OMS afirmó que la enfermedad había sido erradicada en el continente, un alivio para todos los residentes europeos, ya que esta enfermedad fue temida durante muchos años por gran parte de la población. Afortunadamente, son muy pocos los países que actualmente registran casos, y se da casi por hecho que lo ocurrido en Estados Unidos será un hecho puntual.

¿Qué es la polio y cómo curarla?

La polio es una enfermedad cuyo origen data del siglo XIX, y que tiene unos niveles muy altos de contagio. Esta enfermedad, que se transmite habitualmente de persona a persona, daña el sistema nervioso central y provoca daños en el cuerpo que pueden causar diversas consecuencias en caso de que no se controle la enfermedad a tiempo. Una de las secuelas más frecuentes en los contagios leves es la atrofia muscular, que se ha dado en la mayor parte de los casos. También la parálisis en la cara, aunque esta suele ser algo menos habitual.

Existen muchos niveles de contagio, aunque los más frecuentes son los leves. En los casos graves, el sistema nervioso central puede verse muy seriamente dañado, y el paciente puede llegar a morir. De todos modos, estos casos son muy poco comunes. Lo llamativo de la polio es que la mayor parte de las personas que contraen la enfermedad no suelen mostrar síntomas hasta que la persona lleva varias semanas contagiada.

La mejor noticia para evitar una hipotética propagación de polio en el futuro, suponiendo que hubiera nuevos brotes, es que ya existen dos vacunas que se han usado tradicionalmente contra la enfermedad. Ambas fueron aprobadas hace más de medio siglo y siguen empleándose en la actualidad para combatirla. Su eficacia ha hecho que se sigan empleando a día de hoy, ya que, gracias a ellas, esta terrible enfermedad ya es casi irrelevante en el mundo.

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