Estados Unidos
Eric Adams, alcalde de la ciudad, lo acaba de hacer oficial tras la incesante llegada de migrantes y demandantes de asilo, la mayoría provenientes del sur del país.
La ciudad de Nueva York, Estados Unidos, acaba de declarar el estado de emergencia debido a la incesante llegada de miles y miles de migrantes y demandantes de asilo que provienen, en su gran mayoría, del sur del país (Texas).
Según Eric Adams, el alcalde de la ciudad, más de 17.000 personas (la mayoría suramericanos) han demandado un asilo en la Gran Manzana. La imagen de varios autobuses con decenas de personas en su interior llegando a la ciudad estaba siendo ya parte de la normalidad, era una media de 4 o 5 pero este jueves llegaron 9 y hoy viernes 4, según el New York Times.
El alcalde espera gastar 1.000 millones de euros al año para mantener a estas personas y asegura que el sistema de albergues está completamente lleno, por eso ha pedido ayuda federal para que otras ciudades del país también puedan hacer frente a la llegada de estas personas.
Nueva York es una de las pocas ciudades obligadas a cobijar a cualquier persona
"Miles de solicitantes de asilo han sido traídos en autobús a la ciudad de Nueva York y simplemente dejados aquí, sin aviso, coordinación o atención, y más siguen llegando cada día", ha explicado Adams, que hizo otra reflexión: "Esta es una crisis humanitaria que empezó con violencia e inestabilidad en Suramérica y que se está acelerando por las dinámicas políticas estadounidenses", detalló.
Nueva York es una de las pocas ciudades en Estados Unidos que está obligada dar cobijo a cualquier persona, por eso, algunas ciudades del país envían a migrantes a Nueva York o Washington, controladas por demócratas.
"El sistema de albergues está al 100%"
"Nuestro sistema de albergues está operando cerca del 100 % de su capacidad y si estas tendencias continúan, tendremos a más de 100.000 personas en el próximo año. Eso es mucho más de lo que el sistema fue diseñado para manejar. Es insostenible. La ciudad se quedará sin fondos para otras prioridades", ha concluido.
Aun así, la ciudad de Nueva York ha decidido instalar carpas en una isla cercana a Manhattan y espera que estén operativas en las próximas semanas para cobijar a decenas de miles de personas.