EN INGLATERRA
Ali Carstens decidió encargar una tarta de cumpleaños en forma de dinosaurio para celebrar que su hijo Deysel cumplía tres años. El menor es alérgico al huevo por lo que la madre encargó una tarta sin ese ingrediente. Cuando estaban celebrando su fiesta de cumpleaños en Aylesbury, Buckinghamshire, en el sur de Inglaterra, el niño dio un mordisco al pastel y rápidamente comenzó a vomitar.
Los labios del niño comenzaron amoratarse y su rostro se hinchó, por lo que la madre decidió llevarlo al hospital de urgencias ante la mirada atónita de los invitados. La madre explica que aunque especificó a los panaderos que la tarta no podía llevar huevo, finalmente la empresa les confirmó que habían puesto claras de huevo en el pastel.
Por su parte, un portavoz de la compañía negó que las claras de huevo se usaran en el pastel y dijo que podrían haber sido trazas de clara de huevo en polvo utilizadas para otras órdenes ese día. En declaraciones para el Daily Mail, la madre ha explicado que tuvieron que administrarle antihistamínicos y esteroides para tratar de controlar la reacción. La madre ha asegurado que aunque todo quedó en un susto, el niño ahora tiene miedo de comer. "Deysel ahora tiene miedo de comer. Nos resulta muy difícil conseguir que coma por temor a otra reacción", ha explicado.
La empresa implicada publicó un comunicado en el que explican que no saben "cómo pudieron terminar los huevos en una torta sin huevo, pero desafortunadamente, al pensar en ella, me di cuenta de que podían ser trazas de polvo de clara de huevo que se usó ese día".