HAY CINCO DETENIDOS
Decenas de miles de personas de personas han salido a las calles de la India tras conocer la detención de un ex funcionario y cuatro agentes de Policía, entre ellos el subinspector encargado del caso, por encubrir el secuestro, la violación en grupo y el posterior asesinato de una niña de ocho años el pasado mes de enero en un templo hindú de Kathua, en el estado de Jammu y Cachemira, para acusar falsamente del delito a la población musulmana.
Sobre el primer caso, las autoridades indias han acusado al ex funcionario Sanji Ram, antiguo recaudador de impuestos, de preparar el crimen contra la pequeña Asifa para sembrar el pánico entre la comunidad musulmana de los Bajarwal, a la que pertenecía la pequeña, y que despierta la animadversión de la sociedad de mayoría hindú que vive en esta localidad próxima a la frontera paquistaní.
"Sanji Ram es el cabecilla de este crimen horrendo", confirmó a finales del mes pasado el director general de la Policía del estado, Shesh Paul Vaid, en medio de algunas manifestaciones que han ido creciendo en intensidad según se han conocido detalles adicionales del caso. Hoy han sido imputados los ocho arrestados por este caso, según ha informado 'The Times of India'.
Junto al exfuncionario y su sobrino han sido detenidos el subinspector e investigador del caso, Anand Dutta, y otros tres agentes de Policía, según la abogada de la familia, Deepika Singh Rajawat.
Uno de los agentes, identificado com Tilak Raj, ha pasado a disposición policial bajo la sospecha de que llegó incluso a lavar la ropa de la niña antes de entregársela a los forenses, para eliminar pruebas.
Los otros dos agentes han sido identificados como Deepak Khajuria y Surinder Verma. Khajuria ha sido arrestado bajo la sospecha de que fue él quien obtuvo las drogas para sedar a la niña, particularmente difíciles de conseguir. Además han sido detenidas otras