RECIBIÓ CLASES EN LA ESCUELA
Cuando Emma Howard, de 10 años, aprendió en la escuela a realizar la maniobra de Heimlich, no podía imaginar que iba a tener que ponerlo en práctica solo unos días después.
Ocurrió mientras estaba en casa con su madre y ella se atragantó con un trozo de pepino. La mujer, que es enfermera, sabía perfectamente lo que estaba ocurriendo. Notaba que la rodaja estaba bloqueando su tráquea y le impedía respirar. Intentó realizar las operaciones que conocía para tratar de expulsarlo pero era inútil.
En ese momento, Emily llegó a la habitación donde estaba su madre y rápidamente supo lo que tenía que hacer. La mujer salvó la vida gracias a la habilidad de su hija y no tardó en expresar a la escuela su agradecimiento por enseñar a niños tan pequeños estas técnicas, según informa el diario 'Mirror'.