EN EL NORTE DE MÉXICO
Una niña de 10 años murió ahorcada al ser colgada de un árbol por su hermano, de 11 años, y otro menor de 14 años, en el municipio de Namiquipa del norteño estado de Chihuahua, informó una fuente de la Fiscalía estatal.
El suceso tuvo lugar el viernes en la tarde en este municipio ubicado en el occidente del estado y la niña, de 10 años, falleció ahorcada en un árbol, sin que hasta el momento se conozcan los motivos que propiciaron la tragedia.
"Hay dos probables responsables, un niño en este caso de 11 años que por la edad y de acuerdo a la ley es inimputable y este menor fue puesto a disposición de lo que es la Subprocuraduría de Protección Auxiliar de niños y niñas", detalló la fuente de la Fiscalía General del Estado (FGE) de Chihuahua.
Sobre este menor, que es el hermano de la víctima, será la subprocuraduría quien resolverá el tratamiento a recibir en cuestión tutelar y en la "atención de aspectos psicológicos", agregó la FGE. El otro detenido tiene 14 años y fue puesto a disposición de un juez de garantías especializado en justicia para menores infractores.
Este lunes el menor será llevado a la audiencia de control de detención y de formulación de la imputación por el delito de homicidio, apuntó la fuente, quien detalló que por ser menor de edad "la ley establece un tratamiento jurídico distinto".
La FGE explicó que se siguen analizando las pruebas periciales obtenidas. "No se sabe hasta este momento el porqué" del suceso, aclaró la fuente. Namiquipa es un municipio situado a unos 190 kilómetros de Chihuahua capital y con alrededor de 20.000 habitantes.
El municipio consta de varios poblados y comunidades, y fue en la del Terrero donde aconteció este macabro suceso. Se conoce que los padres de la víctima son jornaleros que trabajan en la cosecha de la manzana. "Los menores quedaron solos y fue cuando sucedió la tragedia", puntualizó.
Este suceso recuerda al de la muerte de Christopher, un niño de 6 años, por parte de cinco menores de edad en mayo de 2015 en ese mismo estado. Los niños, al parecer, estaban jugando a ser secuestradores con el niño fallecido, al que ataron, golpearon con piedras e hirieron con un arma blanca, para luego enterrarlo y colocar encima de la tumba un perro muerto para camuflar el cadáver.