Alergias alimentarias

Una niña de 12 años murió tras beber un batido en una cafetería de Londres: "Su muerte podría haberse evitado de manera tan simple..."

Mia Shay St Hilaire, una niña de 12 años, murió tras sufrir una reacción alérgica grave al beber un batido en una cafetería.

Imagen de archivo de batidos

Imagen de archivo de batidosiStock

Mia Shay St Hilaire, una niña de 12 años de Sydenham (Londres), murió tras beber un batido en una cafetería de Bermondsey. El trágico suceso se remonta a agosto de 2023, cuando la menor sufrió una reacción alérgica grave por frutos secos que acabó con su vida en el establecimiento Pop Inn Café, al que había acudido junto a su tía y su hermana.

Mia Shay, que tenía alergia a los frutos secos, ingirió sin saberlo un batido que contenía avellanas y almendras. Debido a ello, fue trasladada de urgencia al hospital, donde murió poco después. La investigación sobre el caso determinó que la máquina de batidos no se había limpiado correctamente: el equipo de seguridad alimentaria y alimentaria del Ayuntamiento de Southwark, encargado de dicha investigación, encontró restos de los mencionados frutos secos en la máquina que eran de una bebida anterior.

Las cámaras de seguridad captaron al encargado del café en ese momento y en las imágenes se vio que no limpió la licuadora antes de preparar la bebida de Mia. El hombre compareció ante el Tribunal de Magistrados de Croydon el mes pasado, donde se declaró culpable de seis cargos de seguridad alimentaria, entre los que se encuentran los siguientes: la falta de información sobre alérgenos disponible y visible para los clientes, la falta de gestión de la contaminación por alérgenos y el servicio de alimentos que contenían un ingrediente alergénico que no debería haber estado presente.

Ahora, ese encargado del café ha sido multado a pagar 18.000 libras y ha recibido una orden comunitaria por la que tendrá que prestar 100 horas de servicio a la comunidad.

"Solo aumenta el dolor que sentimos como familia"

Tras conocer la sentencia, los padres de Mia, Adrian y Chanel, lamentaron profundamente que la muerte de su hija se debiera a algo tan "simple" como limpiar una máquina: "Pensamos en Mia todos los días y saber que su muerte podría haberse evitado de manera tan simple solo aumenta el dolor que sentimos como familia".

"Esperamos que esta condena y multa envíe un mensaje contundente a los negocios que sirven comida y bebida en todo el país sobre las devastadoras consecuencias de no tomar en serio la seguridad alimentaria", añadieron Adrian y Chanel.

Por su parte, Michelle Victor, representante de la familia, añadió que "Mia y todos los demás niños con alergias deberían poder sentirse seguros sabiendo que los negocios que sirven alimentos y bebidas cumplen con la legislación de seguridad alimentaria establecida para proteger sus vidas. Lamentablemente, con demasiada frecuencia, vemos que esto no sucede, lo que puede tener consecuencias trágicas como en este caso".

"Seguimos apoyando a la familia de Mia y, si bien ningún resultado compensará jamás la pérdida que han sufrido, este proceso penal es una parte importante de su lucha por lograr justicia para todos aquellos que sufren alergias alimentarias", agregó.

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