Invasión rusa de Ucrania
En medio del caos y la destrucción en Ucrania, la vida se abrió camino. Una mujer de 23 años dio a luz a una niña mientras se refugiaba en el metro de Kiev por los bombardeos de Rusia.
El drama que se vive actualmente en Ucrania es inmenso. Ya está en marcha un éxodo de cientos de miles de personas que han tenido que abandonar su hogar, las sirenas antiaéreas suenan con fuerza, los bombardeos no cesan y la resistencia de Ucrania permanece frente a los ataques rusos. En medio de ello, siempre hay motivos para la esperanza.
Y en los refugios utilizados por la población ucraniana ha podido comprobarse. Una mujer de 23 años, de nacionalidad ucraniana, acudió al metro para protegerse de los bombardeos junto a su familia. Lo hizo estando embarazada, y con un parto inminente, que, para su sorpresa, se produjo en la tarde de este pasado viernes en el metro de Kiev, donde se hallaba refugiada.
La niña nació en mitad de la guerra, pero su madre no dudó en considerarlo un milagro, y asegura estar muy contenta con el nacimiento de su hija. La pequeña Mia, llamada así, ya ha sido trasladada junto a su progenitora al hospital y ambas se encuentran en buen estado de salud, en lo que ha sido una de las historias más emotivas conocidas hasta ahora.
Preocupación por los niños en Ucrania
Existe una enorme preocupación por el impacto que pueda tener la guerra en los menores ucranianos. Hay más de siete millones y medio de niños en Ucrania, un país que supera los 44 millones de habitantes, y muchos de ellos no pueden huir del país por razones económicas, personales, o de otra índole, lo cual, advierte la ONU, es algo muy grave.
Preocupa también la posibilidad de que los menores en Ucrania puedan ser utilizados como 'niños soldado' o que lleguen a ser utilizados como escudos humanos por los militares. Por lo pronto, la mayoría de padres se ha llevado consigo a sus hijos y tratan de ponerse en un lugar seguro que les permita estar lo más protegidos dentro de las circunstancias actuales.
Ucrania también se ha pronunciado sobre esta cuestión, asegurando que Rusia "ha cometido crímenes de guerra" y que los llevará ante el Tribunal Penal Internacional de La Haya. Entre las pruebas que tienen, y según argumentan, se encuentran los bombardeos y ataques contra determinadas zonas infantiles, principalmente parques, guarderías y colegios.