Estados Unidos
El refrán de que primero va la obligación y después la devoción ha sido aplicado al revés por una mujer en Florida (Estados Unidos). Esta señora ha dejado encerrados dentro del coche a sus tres hijos, todos ellos menores de edad, para irse a jugar al casino al póker. Cuando las autoridades encontraron a los pequeños, estos explicaron que su madre no estaba y que llevaban allí encerrados cuatro horas. Finalmente, la policía sacó a los pequeños del coche y la madre de los menores fue detenida.
Los niños, de 4, 10 y 12 años de edad, han sido apartados de su madre, a quien se le ha prohibido todo tipo de contacto con los menores hasta que la justicia determine en qué deviene el caso. Se han presentado cargos contra la mujer por negligencia infantil, hasta tres, uno por cada uno de los menores, por dejarlos solos en el coche, a expensas de que pudieran sufrir un golpe de calor o cualquier otra clase de infortunio.
A la espera de que se determine cuáles serán las consecuencias para esta mujer por dejar a los menores solos, podría llegar a perder la custodia si se demuestra que ha cometido delitos de negligencia infantil, ya que les expuso a una situación límite donde los menores podían haber perdido la vida si las autoridades no llegan a aparecer.
Estar encerrado durante varias horas en el coche puede llevar a la muerte
Es algo desconocido para muchos, pero lo cierto es que, si una persona queda atrapada o encerrada en un coche durante varias horas, puede llegar a morir, muy especialmente si el vehículo queda expuesto al sol. La falta de hidratación y de oxígeno se incrementa con el paso de las horas, y es vital por ello que una persona no permanezca mucho tiempo encerrada en un coche si este se encuentra parado, dado que ello puede provocar graves complicaciones en la salud, siendo la muerte la peor posible.
Ya se han dado casos así, no solamente en España. Para prevenir este tipo de situaciones, se recomienda que al menos vayan dos adultos en el coche si hay niños dentro del vehículo, y, si es un viaje compartido, que no haya una sola persona en el coche en el momento en que se cierra. Abrir las ventanas, y el techo, si el automóvil es descapotable, también puede favorecer las condiciones para que una persona pueda permanecer tranquila dentro del coche sin poner en riesgo su salud.