Diálisis
El precio de la luz sigue afectado a los ciudadanos, incluso poniendo su vida en riesgo. Una mujer británica que padece diálisis se ve obligada a conectarse cinco veces a la semana a una máquina para sobrevivir.
El precio de la luz obliga a buscar alternativas para quienes no pueden pagar su alto precio, aunque no todos tienen esa suerte. Algunas personas como Dawn White, una mujer británica de 59 años, necesitan conectarse a una máquina para no perder la vida. Esta mujer padece diálisis. Sus riñones "no funcionan" y necesitar mantenerse conectada a una máquina durante al menos "cinco días a la semana, 20 horas".
White asegura que si el precio de la luz continúa subiendo "no podrá permitirse los gastos" y se verá obligada a acudir casi a diario al hospital para recibir el tratamiento de diálisis, aunque su estado de salud sea grave. Esta situación podría poner su vida en peligro ya que la máquina de diálisis es totalmente necesaria para su vida. White lamenta que el precio de la luz la obligue a volver al hospital para poder pagar las facturas de la luz: "no tenemos mucho dinero".
Por el momento, esta ciudadana británica resiste a los precios, aunque con gran dificultad. Ante la posibilidad de que el precio siga aumentando, Dawn White se verá en la obligación de trasladarse al hospital para hacer frente a las facturas y, también, para lo más importante: mantenerse con vida.
El precio de la energía sube un 80%
En Reino Unido, el precio de la energía sigue subiendo. El precio máximo de la energía que las compañías del sector podrán cobrar a los hogares del Reino Unido, a partir del próximo 1 de octubre de 2022, ha sido fijado en 3.549 libras, lo que se traduce en 4.202 euros al año. Estos datos indican un incremento del 80% respecto al límite actual, según ha anunciado este viernes el regulador energético británico, Ofgem.
Se espera que este fuerte incremento dispare aún más la inflación interanual británica, que se sitúa actualmente en el 10,1 %, pero que podría llegar al 13 % o más a finales de año.