DENUNCIA EL OBSERVATORIO SIRIO PARA LOS DERECHOS HUMANOS
Más de cien personas han muerto como consecuencia de las explosiones registradas este lunes en las ciudades sirias de Tartús y Jableh, ubicadas en la costa del mar Mediterráneo, según el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos.
En Jableh, situada en la provincia de Latakia, han tenido lugar al menos tres explosiones, mientras que la ciudad de Tartús, capital de la región homónima, se han registrado otras cuatro. Al menos dos de los atentados fueron obra de terroristas suicidas.
Ambas ciudades han permanecido relativamente al margen de la guerra que ha sumido a Siria en el caos desde marzo de 2011. La parte noroeste del país se ha mantenido en su mayor parte como bastión del régimen de Bashar al Assad.