varios familiares heridos
Un menor ha perdido la vida en Pakistán al confundir una bomba con un juguete. El pequeño, que no sabía lo que tenía en sus manos, llevó la bomba a su casa y se la mostró a su familia durante el desayuno.
El artefacto explotó matando al pequeño e hiriendo a ocho de sus hermanos, a su madre y a un primo.
"Intentaron arrebatárselo y luego explotó, murió en el acto", explica un familiar del niño, que indica que dos de sus hermanos están en estado crítico.
El ejército de Pakistán ha explicado que el artefacto era una bomba de racimo, un arma que libera muchas bombas pequeñas que pueden matar o herir a personas en un área muy grande.