Muertes
Una hora después de despegar el piloto se desmayó. A pesar de asistirle, cuando aterrizaron había muerto.
Durante el vuelo entre Estados Unidos y Turquía, el piloto del avión se desmayó en pleno viaje. La tripulación intentó reanimarlo sin éxito. El equipo de cabina se encargó de tomar las riendas del avión y realizó un aterrizaje de emergencia, pero el capitán de la aeronave murió antes de tomar tierra. Ninguno de los pasajeros ha resultado herido.
El vuelo TK204 de Turksh Airlines estaba programado para realizar el trayecto Seattle-Estambul el pasado martes por la noche. Sin embargo, el avión no pudo llegar a su destino porque el capitán piloto del Airbus 350-900 "se desplomó durante el vuelo", según explica el portavoz de la aerolínea, Yahya Ustin.
Se desmayó una hora después de despegar, mientras el avión sobrevolaba el noreste de Canadá. El equipo de cabina intentó reanimarle practicándole las técnicas de primeros auxilios, pero no dieron resultados. Ante este incidente, un piloto y un copiloto tomaron los mandos de la nave. Decidieron que la mejor opción era desviar la ruta y realizar un aterrizaje de emergencia en el aeropuerto de Nueva York.
El avión tomó tierra tres horas después del incidente médico. Pero desgraciadamente, murió antes de aterrizar en el aeropuerto John F. Kennedy. Desde la compañía informan que ninguno de los pasajeros ha resultado herido y que "el regreso a casa de nuestros pasajeros está previsto a través de la estación de Nueva York".
El capitán de la compañía turca era İlçehin Pehlívan de 59 años y casi dos décadas trabajando para la aerolínea. El pasado 3 de agosto se le realizó un examen periódico de salud en el Centro Médico de Aviación, autorizado por la Dirección General de Aviación Civil. Ustin informa que no presentaba ningún problema de salud que le pudiera afectar para realizar su trabajo.
A través del portavoz, la aerolínea turca envía condolencias a la familia y amigos del capitán: "Como familia de Turkish Airlines, deseamos la misericordia de Dios para nuestro capitán y paciencia para todos sus colegas y seres queridos, especialmente para su afligida familia".
El pasado mes de julio, un avión de la compañía Air Europa tuvo que realizar un aterrizaje de emergencia después de que una bandada de aves chocaran contra una de las turbinas del avión. Los 336 pasajeros del avión no sufrieron daños.
El piloto del avión decidió volver para realizar una revisión por el impacto de varias aves contra la turbina de uno de los motores. Afortunadamente no hubo ningún incidente y aterrizó con las dos turbinas funcionando.
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