Sucesos
El padre ha sido detenido por la Policía por posesión de un arma de fuego como delincuente convicto.
Michael Bragg Jr, un niño de tan solo cuatro años, murió el pasado jueves en Florida, Estados Unidos. El pequeño fue encontrado en el interior del vehículo familiar con un disparo entre los ojos, según informan los registros policiales que recoge el medio de comunicación 'Mirror'.
Al parecer, padre e hijo se encontraban en el coche junto a una tercera persona de la que se desconoce su identidad. Ambos adultos se quedaron dormidos y se despertaron al escuchar un disparo.
Ebony Davis, la madre del pequeño Bragg, había dejado a su hijo con su padre y no sería hasta la mañana siguiente cuando lo recogiese. Sin embargo, una inesperada llamada de un detective le hizo personarse en la comisaría de la policía local.
A la hora de ser interrogado, Michael Bragg Sr, el padre del menor, cambió de versión en varias ocasiones, aunque finalmente confesó que el arma que poseía era con fines de protección. Tras realizar varios registros cerca de la vivienda del padre, una Glock 22 y una pistola de 9 milímetros fueron encontradas en el interior de una maleta. La primera de ellas tenía restos de sangre. Por este motivo, el padre del pequeño Bragg fue detenido por posesión de un arma de fuego como delincuente convicto.
Detenidos unos padres por esconder el cuerpo de su hijo detrás de la pared
Amber-Leah Valentine, de 41 años, y su esposo Jon Imes, de 41 años, informaron que su hijo de 16 años se había escapado y que había sido visto por última vez el día anterior por la mañana. Así lo explica la Oficina del Sheriff del Condado de Mohave.
Tres días después, los agentes fueron avisados para investigar una muerte alrededor de las carreteras Anson Smith e Indian Canyon en Kingman, la misma ciudad de Arizona donde reside la pareja. "A los agentes se les dijo que fue visto por última vez el día anterior alrededor de las 10:00 horas", escribió la oficina según 'Metro'.
La oficina del Sheriff aseguró que "un hombre blanco fallecido fue localizado envuelto en una manta detrás de un muro de piedra". La identidad de la víctima no se conoció de inmediato y el cuerpo fue enviado a un médico forense para determinar la causa y la forma de la muerte.
La madre del menor llamó a las autoridades mientras continuaba la investigación para solicitar atención médica y confesar que junto a su esposo mintieron al decir que su hijo estaba desaparecido.