RECIBIÓ UN MORDISCO EN LA PIERNA
El hombre, que recibió un mordisco del escualo en una pierna, fue trasladado hasta la orilla por otros bañistas que se encontraban en la playa, pero fue declarado muerto poco después, según informa la cadena británica BBC.
La Policía ha cerrado las playas cercanas, en el extremo más oriental del continente australiano, y ha interrogado a un buen número de testigos del ataque, con la intención de determinar la identidad del fallecido y esclarecer los hechos.
En los últimos meses se han registrado varios ataques de tiburones en las playas de Australia --y hasta seis personas han fallecido en los últimos tres años--. El pasado mes de abril, una mujer murió cuando nadaba en una playa de Tathra, también situada en el estado de Nueva Gales del Sur.