Egipto
John y Susan Cooper estaba disfrutando de sus vacaciones en un resort de lujo en Egipto, cuando murieron tras inhalar el vapor producido por la pulverización de un pesticida.
Un matrimonio británico se encontraba de vacaciones enEgipto cuando murieron por envenenamiento mientras dormían en su hotel. Los investigadores han descubierto que el motivo del deceso reside en que la habitación de al lado fue fumigada con un potente pesticida para matar chinches.
John Cooper, de 69 años, y Susan Cooper, de 63 años, estaban disfrutando de unas espléndidas vacaciones en el mar Rojo, concretamente, en Hurgada. Los informes proporcionados dictaminan que estaban en las "vacaciones de su vida" con su hija Kelly Ormerod, sus tres nietos y un grupo de amigos de la familia.
La pareja estaba alojada en una habitación del resort de lujo Steigenberger Aqua Magic Hotel. Al octavo día, la habitación que estaba al lado de la suya, acababa de ser fumigada unas horas antes. Una vez finalizadas las labores de fumigación, la habitación fue sellada con una cinta adhesiva que cubría los alrededores de la puerta. Pasadas las horas, el matrimonio volvió a su habitación para pasar la noche.
Esa noche Molly, una de las nietas de 12 años, se encontraba durmiendo en una cama individual ubicada en la misma habitación que sus abuelos. La pequeña comenzó a sentirse muy mal por lo que el matrimonio decidió acompañarla a la habitación de su madre, Ormerod, salvando de esta forma su vida. Molly aseguró que la habitación olía a levadura. Estas declaraciones serían compartidas por su madre que declaró que el mar olor de la habitación debía estar relacionado con la muerte de sus padres.
Al día siguiente, Ormerod fue a despertar a sus padres al ver que no bajaban a desayunar. Al abrir la puerta se encontró con una escena de lo más extraña, ambos habían enfermado gravemente de un día para otro. Ambos estaban vomitando y el olor de la habitación era extremadamente fuerte.
John Cooper fue declarado muerto en la misma habitación del hotel; Susan Cooper falleció en el hospital a las pocas horas.
Las autoridades egipcias descubrieron que tanto Susan como John sufrían una disentería intestina aguda provocada por la bacteria Escherichia coli.
Omerod luchó contra esta resolución declarando que sus padres eran sanos y estaban en forma, siendo más probable que lo sucedido tuviese algo que ver con el extraño olor de la habitación.
Las declaraciones de la afectada hija fueron escuchadas por un reconocido experto en la infección por Escherichia coli que acabó respaldando su hipótesis.
La investigación ha tenido lugar 5 años después de las muertes de John y Susan Cooper, y se ha enfrentado a numerosas dificultades a la hora de conseguir documentos e informes de las autoridades egipcias.
La habitación contigua a la de los Cooper fue fumigada con Lambda. Siguiendo las informaciones proporcionadas por el informe de la investigación, el pesticida se encontraba diluido con diclorometano, un químico que crea monóxido de carbono.
Las investigaciones demuestran que la muerte, que tuvo lugar en agosto de 2018, tuvo lugar como consecuencia de la exposición a un "agente biológico infeccioso o productos químicos tóxicos", descartando de esta por la intoxicación alimentaria o por monóxido de carbono.
El forense principal de Lancashire en el Tribunal Forense de Preston, James Adeley, sentenció que las muertes fueron ocasionadas por el diclorometano, ya que la pareja, tras inhalar el vapor producido por la pulverización del pesticida, acabó muriendo por envenenamiento.
Robert Chilcott, profesor experto en toxicología, informó en el juicio acerca de la utilización de Lambda mezclado con diclorometano en los países menos desarrollados. A su vez, expuso que esta combinación hace que el cuerpo metabolice o ingiera monóxido de carbono.
El patólogo del Ministerio del Interior, Charles Wilson, declaró que la habitación de la pareja no había sido asegurada, algo que ha tildado de "inconcebible".
Finalmente, Adeley, aseguró que la muerte del matrimonio había sido rápida. Aun así, remarcó que el tratamiento medico proporcionado fue "totalmente insuficiente", ya que no supieron actuar con rapidez, generando un retraso de cuatro horas al llevar a Susan a una clínica en el hotel en lugar de llamar a una ambulancia.