Australia
El animal se acercó a la orilla en actitud pacífica, incluso se dejó tocar por decenas de bañistas. Después de una hora, el cetáceo regresó a las profundidades del mar.
La ballena sorprendió a decenas de bañistas en una playa situada en la costa australiana de la ciudad de Perth. Las imágenes fueron grabadas este fin de semana y finalmente el cetáceo ha fallecido.
El susto de los allí presentes se ha convertido en sorpresa cuando el cetáceo ha mostrado su versión más pacífica. El animal, lejos de ponerse agresivo, se dejó acariciar por decenas de bañistas, provocando una imagen realmente insólita en la costa australiana.
Alrededor de una hora ha estado el cetáceo recibiendo el cariño de varias personas, que seguro no olvidarán fácilmente lo sucedido. Después, la ballena ha regresado a las profundidades del mar.
Según han confirmado a la CNN funcionarios del Servicio de Parques y Vida Salvaje de Australia Occidental, la ballena, de 15 metros de longitud, ha fallecido este martes por la mañana tras salir nadando del banco de arena hacia aguas abiertas. "Se movía con cautela y nadó sólo 200 ó 300 metros antes de detenerse. Su respiración nos dio algunas señales de que realmente estaba llegando al final", ha explicado a la CNN Mark Cugley, controlador de incidentes del Servicio de Parques y Vida Silvestre.
El cetáceo estuvo en peligro el sábado cuando llegó a la playa. Según explica la experta en mamíferos marinos del gobierno Kelly Waples, la interacción con los bañistas pudo haber aumentado su estrés. "Las ballenas son animales pelágicos, es decir, viven en aguas profundas y es ahí donde buscan alimento y pasan el tiempo. Es bastante inusual verlos tan cerca de la costa", indica la experta.
Tras su contacto con las personas, la ballena fue vista el lunes varada en un banco de arena cercano "delgada, demacrada y en un lugar al que no pertenece", ha asegurado Waples. "Ha llegado a esta zona en muy mal estado de salud y es muy poco probable que sobreviva", señala en declaraciones recogidas por la CNN.
Un comunicado del Servicio de Parques y Vida Salvaje de Australia Occidental ha informado de que los guardas trasladarán ahora el cadáver de la ballena un lugar "más seguro en el agua, lejos de la playa".