TENÍA UNA LEGIÓN DE SEGUIDORES
Eli Thompson es un niño de Alabama que nació con una enfermedad llamada arhinia congénita que le impide respirar con normalidad dado que no tiene vías nasales ni cavidades sinusales.
Cuando tenía tan solo cinco días los médicos le tuvieron que practicar una traqueotomía para que pudiera respirar con facilidad, sin embargo, pese a luchar contra su enfermedad, ha fallecido a los dos años, tal y como anunciaba su padre a través de Facebook.
"Hemos perdido a nuestro pequeño compañero. Nunca llegaré a entender por qué ha pasado, y esto va a doler durante un tiempo. Pero estoy agradecido por haber tenido a este precioso niño en mi vida", dice Jeremy Finch, que añade que el pequeño "acabó su carrera mucho antes de lo que nos hubiera gustado, pero era la hora de que Dios se lo llevara de vuelta".
Eli tenía una legión de seguidores que le apoyaban y le animaban a través de las redes sociales.