Asesinato
Un vigilante de seguridad del equipo de grabación de la serie estadounidense 'Ley y Orden' ha sido asesinado en Brooklyn, Nueva York, tras recibir disparos en el cuello y cara tras una emboscada. Según el Departamento de Policía de Nueva York (NYPD), Johnny Pizarro, de 31 años, estaba sentado en un coche aparcado en el vecindario de Greenpoint cuando fue atacado sobre las 05:15 (hora local).
El sospechoso, buscado por las autoridades, abrió la puerta del automóvil y disparó a la víctima. Pizarro tuvo que ser trasladado al hospital, donde fue declarado muerto en torno a las 6:00 horas (hora local). La cadena estadounidense 'NBC' ha informado que un portavoz de NYPD dijo que la víctima recibió un total de cuatro disparos.
El estudio Universal Television y NBC lamentan la muerte del hombre de 31 años en un comunicado: "Estamos muy tristes y conmocionados al escuchar que uno de los miembros de nuestro equipo ha sido víctima de un crimen esta mañana y como resultado ha muerto". Además, han comunicado que se encuentran trabajando con las autoridades mientras continúan las investigaciones. Piden respetar la privacidad de la familia y amigos de la víctima.
Investigación abierta
La oficina del alcalde de Eric Adams de Nueva York ha informado que la investigación para dar con el sospechoso del asesinato está abierta. Detallan que "la seguridad de todos los neoyorquinos es nuestra principal prioridad". "Ofrecemos nuestro más sentido pésame a la familia, amigos y compañeros de trabajo de la víctima durante este momento difícil, y trabajaremos diligentemente para llevar al sospechoso ante la justicia y detener la ola de violencia armada que estamos viendo", añaden.
'Ley y Orden: Crimen Organizado', transmitirá su tercera temporada en otoño. Es uno de los tres programas de 'Lay y Orden' para NBC, todos grabados en locaciones de Nueva York.
Desde NYPD anunciaron a principios de julio que la violencia armada se redujo un 13% en los primeros seis meses del año, respecto al mismo periodo de 2021 y que el número de víctimas mortales y heridos por disparos de armas también disminuyó un considerable 11 %, aunque aumentaron el resto de crímenes en la ciudad.