Ahogamiento
En un despiste de sus cuidadores el menor cayó a la piscina que no tenía vallas de protección. La guardería no está habilitada para su uso.
Un bebé de dos años que se encontraba en la guardería cayó a la piscina y murió ahogado. Ocurrió en torno a las 10 de la mañana del martes, en una escuela infantil situada entre las calles Legión Civil Extranjera y Las Perlas del barrio Recoleta de la ciudad de Asunción (Paraguay).
En el lugar intervinieron agentes de la comisaría 6ta Criminalística, Homicidios y del Ministerio Público que aseguraron que: “Una criatura, menor de 2 años y diez meses, perdió la vida en circunstancias por ahogamiento. Cayó a una pileta que contenía agua, un descuido de los cuidadores y de la propia niñera que estaban al cuidado del menor. Jugando cayó a la pileta”, dijo el subcomisario Juan Medina, subjefe de la Comisaría 6ta de Asunción
Al parecer el menor se encontraba con otro niño cuando cayó a la piscina que “no contenía ninguna valla de seguridad” y se ubicaba al final del terreno, lugar donde vive la propietaria y dueña del local.
Sospechan que estos dos niños desaparecieron cuando “Estaban realizando pintadas. La que es la encargada, en un momento empezaron a lavarles las manitas a las criaturas y en ese ínterin este menor se perdió de la vista de los encargados y hay una puerta de blindex que siempre se encuentra llaveada y en ese momento justo no se encontraba llaveada” relató el subcomisario Juan Medina, en un contacto con la emisora 1020 AM.
Según los datos recabados por la Policía la guardería se encontraba en proceso de rehabilitación y no estaba preparada para su utilización, a pesar de que lo hiciera desde 2021.
Las autoridades avisaron a los padres una vez el niño fue trasladado al Centro médico Bautista “para no perder más tiempo a la espera de la ambulancia”. Finalmente, los equipos médicos no pudieron hacer nada para salvarle la vida y su muerte ha sido diagnosticada como asfixia mecánica por sumersión.
El pasado mes de mayo, la encargada de una guardería fue declarada culpable de la muerte de una bebé a la que mató boca abajo en un puf durante dos horas. Genevieve Meehan era el nombre de esa bebé cuyo fallecimiento ha conmocionado a la pequeña localidad inglesa de Cheadle Hulme, cerca de Stockport.
La escena de este trágico suceso es la guardería 'Tiny Toes Nursery'. Allí fue donde encontraron el cuerpo sin vida de la pequeña, inconsciente y de color azul, síntomas de asfixia. Aunque la bebé de nueve meses fue trasladada de urgencia al hospital, los sanitarios no pudieron hacer nada por salvarla y murió ese mismo día.
Kate Roughley, de 37 años y directora del centro infantil, ha sido condenada por la muerte de Genevieve después de que un jurado formado por seis hombres y seis mujeres la declarara unánimemente culpable de homicidio involuntario en el Tribunal de la Corona de Manchester.
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