San Francisco
No sin mi casa, es lo que debió pensar un vecino de San Francisco en Estados Unidos, cuando decidió mudarse con la casa a cuestas. El propietario de una casa victoriana de 465 metros cuadrados quería cambiar de barrio, pero no estaba dispuesto a renunciar a su vivienda. ¿Cuál fue la solución? Cargar en un remolque la mansión y trasladarla a la nueva ubicación.
Casi 140 años de vida tiene el inmueble pero eso no impidió que su propietario la colocara sobre una enorme plataforma hidráulica con ruedas, arrastrada por un camión, para desplazarla. No obstante, la operación estuvo supervisada por un equipo de especialistas, ingenieros y obreros que cuidaron hasta el mínimo detalle del movimiento del gran edificio de 2 plantas. La complejidad del traslado provocó también que varios operarios tuvieran que cortar las ramas de los árboles que estaban entorpeciendo el paso del remolque. Para agilizar el trayecto se retiraron parquímetros, parte del alumbrado público y algunas líneas eléctricas.
Mudanza al estilo San Francisco
Un total de 7 manzanas tuvo que recorrer la casa a cuestas mientras los vecinos, perplejos ante el espectáculo, inmortalizaban la escena. El dueño ha tenido que pagar 400.000 dólares por la mudanza, algo más de 325.000 euros. En su nueva ubicación esta casa se convertirá en 7 viviendas, aunque conservará su fachada.
Algunos usuarios han destacado que la casa, edificada en 1880, ha logrado sobrevivir a grandes terremotos e incendios como los ocurridos en los años 1906 y 1989, por lo que la mudanza no ha supuesto ningún problema. Lo cierto es que en la ciudad no se presenciaba una mudanza similar desde hacía más de 40 años.