Reencuentros
Más de una década después, Kadisha Montañez ha podido abrazar a su hija Cinthya Miranda. Su padre se la llevó de Estados Unidos a Nicaragua cuando tenía cinco años y durante ese tiempo no pudo verla ni saber nada de ella.
Su madre explica a 'Diario Libre' que ambos se separaron y el padre se la llevó a EEUU cuando ella estaba en la cárcel, lo que dificultó su reacción al caso. Pasaron los años y su madre seguía sin saber nada de ella hasta que un día recibió un sorprendente mensaje en Facebook. "Puede ser una coincidencia o la provincia de Dios... Dígame, ¿es posible que sea su hija?".
El mensaje lo enviaba una monja desde un orfanato en Nicaragua. Montañez pensó que era un fraude. Pero la monja le compartió varios detalles personales sobre su hija. Finalmente, la madre viajó desde en Doraville (Georgia) hasta Nicaragua para abrazar a su hija.
La niña vivió durante diez años engañada porque su padre le contó que su madre la había abandonado. "Me dijo: 'No te aman, te odian'".