ACLARAN QUE NO ES UNA "DEVOLUCIÓN EN MASA"
Los ministros de Interior de la Unión Europea seguirán este jueves avanzando en la búsqueda de soluciones a la crisis de refugiados, incluido el modo de llevar a la práctica el principio de acuerdo logrado el pasado lunes con Ankara para deportar a Turquía a todos los inmigrantes irregulares que lleguen a Grecia, incluidos los demandantes de asilo sirios.
El pacto ha sido recibido con criticas y preocupación por ONG y otras agencias humanitarias, incluida la del Alto Comisionado de Naciones Unidas para el Refugiado (ACNUR), que ha mostrado su preocupación porque duda que el plan de deportaciones sea legal y compatible con la Convención de Ginebra.
Bruselas y los gobiernos de la UE, sin embargo, sostienen que se trata de una medida "legal" y en pleno cumplimiento del Derecho internacional y europeo, y se muestran convencidos de que los contactos de los próximos días para "aclarar" cuestiones jurídicas y técnicas así lo demostrarán.
El plan contempla la deportación a Turquía de todos aquellos que no lleguen por vía legal a la UE a través de Grecia y los países de la UE se comprometen a reubicar de forma voluntaria directamente desde Turquía a un número de refugiados equivalente al de expulsados.
Un alto funcionario europeo ha destacado que "no hay alternativa" a este plan para contener la llegada masiva de inmigrantes a territorio comunitario, y ha defendido que quienes huyen de la guerra de Siria desistirán de intentar llegar de manera irregular a la UE cuando vean que son devueltos de inmediato y relegados "a los últimos de la lista" en el programa de reubicación.
En cualquier caso, la discusión de ministros será un examen inicial y no se esperan decisiones, habida cuenta de que las negociaciones para cerrar los detalles del acuerdo están siendo dirigidos por el equipo del presidente del Consejo europeo, Donald Tusk.
El objetivo es solventar las dudas y aclarar las cuestiones abiertas a tiempo para la próxima cumbre europea de los días 17 y 18 de marzo, a la que se espera que también se una en algún momento el primer ministro turco, Ahmet Davutoglu.
Los ministros también discutirán del impacto en el flujo migratorio del anunciado cierre de la ruta de los Balcanes, después de que después de que Eslovenia se haya sumado a Croacia, Serbia y Macedonia en negar el paso a su territorio a los inmigrantes irregulares.