MURSI SE REÚNE CON LOS JUECES
El ministro egipcio de Justicia, Ahmed Meki, afirmó que la crisis actual en el país está a punto de resolverse y que todo ha sido un malentendido por la falta de claridad del presidente Mohamed Mursi cuando blindó sus poderes mediante un decreto. "Mursi cuida mucho el establecimiento de un Estado de derecho y lo que ha pasado ha sido un malentendido por la falta de claridad en las intenciones del presidente y el ambiente de discordia", dijo Meki a los periodistas, tras una reunión de ministros de Justicia en la sede de la Liga Árabe en El Cairo.
El mandatario egipcio tiene previsto reunirse con el jefe del Consejo Superior de Justicia y del Tribunal de Apelación, Mohamed Metuali, para analizar la crisis originada por la declaración constitucional. Con esta reunión, Mursi quiere conocer de primera mano la opinión de los jueces sobre el citado decreto, que blinda sus poderes frente a la Justicia. Hace dos días, el Club de Jueces, la asociación de la magistratura en Egipto, decidió suspender el trabajo en todos los tribunales y fiscalías del país, en protesta por esa medida.
Este domingo, el Consejo Superior de Justicia, máximo órgano de gobierno de la judicatura, calificó de "agresión sin precedentes contra la independencia del poder judicial" la declaración constitucional, aunque pidió a los jueces y fiscales que continúen en sus puestos de trabajo por el interés de la población.
Meki apoyó "totalmente" el comunicado del Consejo Superior de Justicia y consideró que "en cuanto las dos partes se reúnan (Mursi y los jueces) las diferencias desaparecerán". El ministro denunció la existencia de "fuerzas políticas que obstaculizan este proceso con casos políticos". En un intento de calmar los ánimos, la Presidencia egipcia insistió en que la declaración constitucional es temporal y que no pretende concentrar poderes, al tiempo que hizo un llamamiento a las distintas fuerzas políticas para lograr un consenso sobre la Constitución.
Un adolescente de 15 años, seguidor de los Hermanos Musulmanes, falleció y otras sesenta personas resultaron heridas durante el asalto a una sede de la cofradía islámica en el norte de El Cairo. Las sedes de la Hermandad han sido objetivo de asaltos desde el jueves pasado, mientras que los opositores al presidente mantienen una acampada en la plaza cairota de Tahrir, cuyas inmediaciones han sido escenario en los últimos días de choques entre manifestantes y la policía, en protesta por el decreto.