Coronavirus
Los manifestantes protestan contra el pasaporte COVID o contra la vacuna obligatoria.
Unas 8.000 personas recorrieron este domingo las calles de Bruselas en protesta contra las medidas sanitarias para contener el coronavirus y la posible obligatoriedad de la vacuna mientras el país afronta tasas récord de incidencia acumulada desde el comienzo de la pandemia. Al menos 20 personas han sido detenidas. Los agentes han lanzado gases lacrimógenos y han utilizado cañones de agua para dispersar a los manifestantes más violentos
Protestan contra las restricciones, contra el pasaporte COVID o contra la vacuna obligatoria para el personal sanitario y los bomberos porque lo consideran "contrario a los derechos fundamentales y discriminatorio". En el país los datos de coronavirus se sitúan en cifras récord respecto a la incidencia acumulada alcanzando los 2.127 casos por 100.000 habitantes a 14 días.
Hay desplegado un enorme dispositivo policial para tratar de evitar que se repitan los violentos disturbios de hace 2 semanas que dejaron más de 40 detenidos, 3 heridos y numerosos daños materiales. Hay agentes de uniforme, pero también agentes de paisano, ya que los servicios de inteligencia alertan de un creciente malestar social contra las medidas covid.
Sociedad polarizada
Lo peor es que las autoridades alertan de que es un discurso que a veces se manifiesta de forma violenta y que está empezando a calar en la sociedad. Según Órgano de Coordinación para el Análisis de las Amenazas belga, estos discursos favorecen "una mayor polarización, extremismo y amenazas".
En general, la manifestación ha transcurrido de manera pacífica, aunque en calles cercanas a la Comisión Europea y el Consejo de Europa se lanzaron algunos proyectiles. Esto hizo que la Policía activara cañones de agua y usara gases lacrimógenos.