una prisión de Puerto Ayacucho
El Parlamento de Venezuela, de mayoría opositora, abrirá una investigación sobre la matanza en la que al menos 37 personas murieron y 14 funcionarios resultaron heridos durante la toma de una prisión de Puerto Ayacucho, en el estado Amazonas, al sur de Venezuela, según ha informado el Ministerio Público (MP).
Según el gobernador del estado, el opositor Liborio Guarulla, la matanza ocurrió al tomar fuerzas especiales militares "por la fuerza" el Centro de Detención Judicial de Amazonas, situado en Puerto Ayacucho, y costó la vida al 40 por ciento de los reclusos del penal. "Hemos designado una Comisión Técnica, que se dedicará a la exclusiva investigación del caso con la prontitud que demanda", explicó en Twitter el diputado Richard Blanco, el presidente de la Comisión Penitenciaria del Parlamento.
Una fuente que conoció de primera mano el incidente indicó que la violencia en ese penal del Ministerio de Interior se desató en el momento en que una comisión mixta de la Policía Nacional Bolivariana y la Guardia Nacional Bolivariana practicaba una requisa. "Los familiares pueden formular sus denuncias en la Oficina de Atención al Público, en la Comisión Penitenciaria de la Asamblea Nacional (Parlamento)", afirmó el diputado Blanco, abogó por tratar "con la mayor celeridad" posible "masacres como estas" y afirmó que "la violencia intramuros no debe jamás pasar por debajo de la mesa".
Según datos ofrecidos anoche por el gobernador Guarulla, cuatro personas resultaron heridas en los hechos, mientras que un preso se fugó de la cárcel. La oposición al Gobierno del presidente Nicolás Maduro ha condenado duramente lo ocurrido en el estado de Amazonas. "Todos debemos condenar y exigir justicia y que el mundo sepa de lo ocurrido en Amazonas! 37 asesinados!", escribió en Twitter el dos veces candidato presidencial de la oposición Henrique Capriles, que mencionaba una cuenta de la ONU en su mensaje en la red social.
"Ya regresó Maduro de su viaje 'secreto' que no fue secreto a Cuba a rendirle cuentas al país de esta nueva masacre en Amazonas?", preguntó Capriles en alusión al reciente viaje del presidente de Venezuela a Cuba para rendir homenaje al fallecido presidente Fidel Castro. Maduro no se ha pronunciado hasta el momento sobre los hechos del centro de detención de Amazonas, y el ministro de Interior, Néstor Reverol, responsabilizó a la gobernación de la región, en manos de la oposición, de lo ocurrido en la cárcel, que según el titular de esta cartera dependía de las autoridades regionales.
El gobernador de Amazonas, el opositor Liborio Guarulla, fue el primero en denunciar las muertes, y aseguró que la "masacre" ocurrió por la actuación de una Unidad Especial del Ministerio de Relaciones Interiores Justicia y Paz que intentó tomar "por la fuerza" el retén.
Una fuente que conoció de primera mano el incidente indicó que lo ocurrido en el Centro de Detención Judicial de Amazonas (CDJA), que es una cárcel del Ministerio de Interior, detonó en el momento en que una comisión mixta de la Policía Nacional Bolivariana y la Guardia Nacional Bolivariana practicaba una requisa.
Venezuela, el tercer país con la menor población reclusa de la región, tiene un promedio de 166 presos por cada 100.000 habitantes, según datos oficiales. Sin embargo, el sistema penitenciario ha sido por años uno de los más violentos de América Latina.
El Gobierno chavista ha implementado un plan de pacificación de las cárceles del país que dirigen el Ministerio de Servicios Penitenciarios, que ha implantado un régimen militarizado en más de la mitad de las cárceles del país, pero que aún no ha logrado desarticular las más violentas.