EL TORNADO TENÍA UNA VELOCIDAD DE 300 KILÓMETROS POR HORA
Al menos dos personas han muerto y varias han resultado heridas en una pequeña localidad del norte de Illinois, Fairdale, después de que un tornado haya arrancado los cimientos de viviendas y dejado a los vecinos sin suministro eléctrico.
El límite de velocidad dentro del pueblo de Fairdale es de 70 kilómetros por hora y el tornado ha entrado a 300. En este pueblo, la furia de los vientos, además de acabar con la vida de dos vecinos, deja una decena de heridos y un paisaje devastado. Un tercio del pueblo está completamente destruido.
La fuerza de la naturaleza también se ha dejado sentir en Rochelle, cerca de la ciudad de Chicago. Las autoridades dicen estar bastante seguras de que no hay víctimas entre los escombros.
El frente de tormentas, granizo y tornados se desató el miércoles. Afecta el conocido 'callejón de los tornados' que se extiende por el Medio Oeste de Estados Unidos, una población de casi 100 millones de habitantes. En primavera comienza la temporada de estos fenómenos meteoreológicos que nacen a ras de suelo.