China
El suceso ha ocurrido en la ciudad china de Ningxia. Las causas del siniestro se encuentran bajo investigación.
Al menos 31 personas han muerto en la explosión de un restaurante ubicado en la ciudad noroccidental china de Yinchuan, capital de la región autónoma de Ningxia, en el noroeste de China.
"Una fuga de gas licuado de petróleo causó una explosión durante el funcionamiento de un restaurante de parrilla", ha detallado la agencia estatal Xinhua.
Los bomberos han estado varias horas buscando bajo los escombros supervivientes y apagando los focos de las llamas que han provocado la tragedia.
Durante la deflagración siete personas "reciben atención de rescate" y una de ellas se encuentra en "condición crítica". Además, dos personas han sufrido quemaduras severas, otras dos han sufrido heridas leves y dos más rasguños causados por vidrio, tal y como ha precisado la citada agencia del régimen.
La explosión ocurrió a alrededor de las 20:40 hora local de este miércoles en el Restaurante de Barbacoa Fuyang, en una zona residencial del centro de Yinchuan. El accidente ha sucedido en la víspera del Festival del Bote del Dragón.
El Ministerio de Gestión de Emergencias ha indicado que los servicios locales de bomberos y rescate enviaron a más de 100 personas y 20 vehículos al lugar. "Inmediatamente exigieron que se organicen todos los esfuerzos de búsqueda y rescate, que los heridos sean tratados adecuadamente y que las bajas se reduzcan tanto como sea posible", ha apuntado el ministerio.
Según la cadena CCTV, el presidente chino, Xi Jinping, "exigió todos los esfuerzos necesarios para tratar a los heridos y el fortalecimiento de la supervisión y gestión de la seguridad en industrias y campos clave para proteger de manera efectiva la vida y la propiedad de las personas".
A pesar de que el gobierno central prometió medidas de seguridad más estrictas desde que una explosión en 2015 en un almacén de productos químicos en la ciudad portuaria norteña de Tianjin acabara con la vida de 173 personas, lo cierto es que no es la primera vez que ocurre un suceso similar.
En enero cinco personas perdieron la vida en otra explosión en una planta química en el noreste de China, y en 2022 se notificó otro fallecido en el incendio de otra fábrica en Shanghái, en el este del país.
Este tipo de accidentes eléctricos suelen ser frecuentes en China porque las normativas siguen sin respetarse y porque no existen protocolos específicos de seguridad contra incendios.