LOS PADRES TIENEN ANTECEDENTES
Xiomara Naomi Méndez Morales tenía 15 años y vivía en Argentina, aunque sus padres eran peruanos. El pasado martes fue secuestrada por un conocido de su madre y un cómplice cuando salía de la escuela y ambos se la llevaron a un Fiat Duna rojo. Una hora más tarde llamaron a la familia y le pidieron 30.000 pesos (cerca de 725 euros) y cocaína, rescate que sus familiares pagaron.
Sin embargo, en lugar de volver sana y salva a casa, la adolescente con dos hermanos menores apareció muerta en el asiento trasero del coche que fue interceptado tras un accidente de tráfico y los informes preliminares indican que murió asfixiada por un cinturón que el colocaron en el cuello, según recoge el diario 'Clarín'.
Según los investigadores, Jessica Patricia Morales Pérez, la madre de la víctima, y Luis Gerardo Méndez Portilla, su padre, tienen antecedentes, por lo que todo apunta a que el caso se trate de venganza o un ajuste de cuentas vinculado al narcotráfico.