Guerra Rusia y Ucrania
Miles de civiles se preparan para intentar salir de la ciudad de Mariúpol. Se trata de una de las ciudades más castigadas por la invasión rusa en Ucrania desde hace un mes.
Mariúpol es la ciudad más castigada por la guerra en Ucrania. Apenas queda algún edificio en pie. El 90% de los edificios han quedado destruidos. Las autoridades ucranianas cifran en 75.000 los ciudadanos evacuados a través de corredores humanitarios. Informa de que otros 100.000 civiles están a la espera de poder salir de forma segura a través de un corredor humanitario hacia Zaporiyia.
Denuncian que el Ejército ruso se centra en Mariúpol tras abandonar por el momento laocupación de Kiev. También que, para conquistarla, están utilizando tropas transferidas desde Abjasia, una autoproclamada república en territorio georgiano y cuya independencia Rusia reconoce.
Miles de personas atrapadas en la ciudad tienen la última oportunidad para salir. Ni siquiera en los refugios están a salvo. Mariúpol es un campo de batalla desde que comenzó la invasión rusa; es una de las más afectadas. Las bombas la han dejado en ruinas en un mes.
"Ya no existe Mariúpol, lo han bombardeado por completo", dice una vecina. La gente improvisa tumbas en las calles de aquellos que no han logrado sobrevivir a los bombardeos.
45 autobuses hacia Mariúpol
El Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) confirma el envío de 45 autobuses para la evacuación. 28 de los autobuses debieron pedir permiso para pasar por el punto de control ruso en Vasilievka y 17 más habían salido de la ciudad de Zaporiyia.
Rusia confirmó que mantiene su disposición a permitir un corredor humanitario, pero no muchos creen que sea efectivo. Pocos confían en la palabra de los rusos, como dice Verónica Dikhtiar, una ucraniana cerca de Kiev. "No hay ningún corredor seguro, la gente cruza jugándose la vida", afirma.
Y desde el CICR consideran que "el tiempo se acaba para los civiles en Mariúpol y en otras áreas de primera línea que llevan semanas sin asistencia humanitaria".
Mariúpol es una ciudad clave en la invasión rusa. Su toma uniría los territorios del Donbás y Crimea. Además, alberga el mayor puerto comercial del mar de Azov.