SE TRATA DE UNO DE SUS PRINCIPALES ARGUMENTOS DE CAMPAÑA
La candidata de la extrema derecha a las presidenciales francesas, Marine Le Pen, se mostró convencida de que Italia, España, Grecia o Portugal también querrían renegociar el euro, una de sus principales argumentos de campaña, ya que acusa a la moneda única de "hundir" la economía.
Le Pen, en una entrevista a la cadena de televisión pública 'France 2', insistió en que "no (estará) sola" cuando, si gana los comicios en mayo, se ponga a renegociar las condiciones de pertenencia de Francia a la Unión Europea. "La realidad -argumentó- es que muchos países sufren de Schengen, de la apertura de las fronteras y de la inmigración masiva; sufren de esta moneda (el euro) que hunde nuestra economía, y que es una de las razones del paro masivo".
Añadió que está "convencida" de que sobre el euro "Italia, España, Grecia y Portugal" se sumarán a su posición "cuando Francia haya asumido el liderazgo de esta negociación", y dijo que si hasta ahora esos países no lo han hecho es porque "no se sienten lo suficientemente fuertes individualmente". "Créanme: habrá muchos en la mesa de negociación", subrayó la presidenta del Frente Nacional francés.
En este sentido, reiteró su voluntad de negociar un cambio de las condiciones de pertenencia a la UE y de someter el resultado a un referéndum de los franceses, lo que podría significar la salida del euro e incluso de la Unión Europea. Insistió en que al final serán los franceses los que se pronunciarían porque quiere darles "el poder político". Y al ser preguntada sobre las amenazas que entrañaría el abandono de la moneda única para financiar la deuda pública francesa, Le Pen replicó que esa suposición es un "chantaje" de los mercados que luego no se cumple, como a su juicio lo prueba que no han ocurrido los augurios que vaticinaban por el "brexit". Además, aseguró que "no es el euro el que permite tener tipos (de interés) bajos" para financiar la deuda, y que el problema de fondo es el del déficit, que se soluciona creando empleo.
La candidata de la ultraderecha también justificó su rechazo a que la UE negocie acuerdos comerciales en nombre de Francia, algunos de los cuales tienen efectos "dramáticos" para su país, como los establecidos con los países del Magreb, que afectan a sus productores de frutas y hortalizas, o el de Ecuador, que "mata" el plátano de los departamentos franceses de ultramar.
"La UE -denunció- negocia sin tener en cuenta los intereses de Francia". Según las encuestas de las últimas semanas, Le Pen el próximo 23 de abril se calificará para la segunda vuelta de las presidenciales e incluso podría acabar ese día en primera posición con más del 25 % de los votos. Ningún sondeo, sin embargo, la ha dado ganadora en la segunda vuelta, que se celebrará el 7 de mayo.