SEGÚN LA AGENCIA ESTATAL
La policía de Noruega reabrió hoy la estación central de Oslo, que permaneció cerrada unas dos horas a causa de la detección de una "maleta sospechosa" en el interior, informó la televisión pública "NRK".
La alarma se disparó pasadas las 07.30 horas (05.30 GMT), cuando una persona entró en el edificio con una maleta, la dejó en uno de los andenes y acto seguido abandonó el lugar, según apuntaron las fuerzas de seguridad. A continuación, la policía optó por evacuar la estación de pasajeros y cerrarla al tráfico ferroviario mientras desplazó a un equipo de artificieros al lugar, emplazado en el corazón de Oslo y a sólo unos centenares de metros de donde explotó el potente coche bomba que mató a ocho personas el pasado viernes.
Los especialistas encontraron poco después el objeto sospechoso y, tras examinarlo, determinaron que su contenido no era peligroso. La estación central de Oslo reabrió sus puertas pasadas las 10.15 horas (08.15 GMT), según medios locales.
Según las primeras informaciones de la policía, la persona que presuntamente dejó el objeto sospechoso es un hombre negro, "posiblemente africano", de entre 25 y 30 años, y entre 180 y 185 centímetros de altura. Se trata de la tercera vez que la policía evacúa la estación central desde el doble atentado del pasado viernes en Noruega, en el que murieron 76 personas, ocho a consecuencia de un coche bomba en el centro de Oslo y 68 tiroteadas en un campamento juvenil en una isla cercana.
En las dos ocasiones anteriores, el mismo viernes por la tarde y el domingo a mediodía, la alerta resultó ser infundada. El autor confeso del atentado, un noruego de 32 años llamado Anders Behring Breivik y de ideología ultraderechista e islamófoba, fue detenido en la misma isla por la policía y ya compareció ante el juez instructor el lunes