LOS CORTES AFECTAN A 14 ESTADOS
El Gobierno venezolano dijo este martes que un incendio provocado en el patio de generación de la principal central hidroeléctrica del país causó el apagón que afecta desde ayer a Caracas y gran parte del territorio, el segundo en esta nación en menos de un mes.
El ministro de Información de Venezuela, Jorge Rodríguez, dijo en Twitter que un incendio en la central del Guri, que provee de energía a casi 70% del país, afectó a las máquinas del patio de generación que alimenta a la línea de transmisión de 765 KVA (kilovoltios-amperios).
"Los criminales crearon un incendio en el patio de 765 KVA del Guri, con la intención aviesa de dañar de modo definitivo la generación y transmisión de la carga", indicó. "Al calcinar el patio y las vías de transmisión, los terroristas lograron su cometido de que las maquinas de generación y la transmisión cayeran generando el apagón", añadió.
El Gobierno venezolano suspendió durante 24 horas las actividades laborales y educativas mientras el Gobierno trata de recuperar el suministro eléctrico que a las 12.15 hora local (16.15 GMT) estaba comenzando a llegar a diversos puntos del país. De acuerdo con Rodríguez el sistema eléctrico venezolano sufrió el lunes dos ataques: uno pasada las 13.00 locales (17.00 GMT) y el último a las 21.50 locales, que revirtió el proceso de "recuperación" del suministro.
El fallo eléctrico ha mantenido la actividad comercial y de servicios prácticamente suspendida. Este nuevo corte se suma al que ya padeció el país el pasado día 7, por el que entonces el Gobierno de Nicolás Maduro culpó a Estados Unidos y a la oposición.
Según el mandatario, un "ataque cibernético" desde Estados Unidos a la sala de control del Guri y sabotajes "electromagnéticos" a las líneas de transmisión generaron aquella falla. Maduro se refirió hoy en Twitter al corte del servicio y aseveró que el chavismo derrotará a sus enemigos en sus intentos de desestabilizar el país.
Venezuela atraviesa una nueva fase de tensión política desde que el pasado enero Maduro juró un nuevo mandato de seis años que no reconocen la oposición y parte de la comunidad internacional y, en respuesta, el jefe del Parlamento, Juan Guaidó, proclamó un Gobierno interino.