LA NUEVA HEROÍNA DE LONDRES
La mujer que fue capaz de desafiar a los asesinos del soldado británico, aseguró en exclusiva para una televisión local, que había interrumpido al agresor "para que no apuntara con las armas a una persona."
Su nombre es Ingrid Loyau-Kennett y tiene 48 años. En el momento de actuar no se vio superada por los terribles acontecimientos. En una entrevista aseguró que uno de los agresores le confesó que quería "iniciar una guerra en Londres este miércoles."
La madre de dos niños que corrieron al contemplar la escena de sangre, se armó de valor al descubrir que el arsenal del crimen se basaba en un par de cuchillos y una pistola.
"Enseguida comprendí que no se trataba de un adicto a las drogas o el alcohol, tampoco estaba borracho, tan solo sorprendido, conmocionado", describió al protagonista del vídeo que ha inundado las redes sociales.
A continuación se acercó al segundo sospechoso y le pidió que le facilitara sus armas, porque "pensaba que era mejor que se centraran en mi en lugar de en los niños que comenzaron a abandonar la escuela", aseguró en ITV News.