Ghana
Los familiares alertaron a las autoridades sanitarias después de ver un rastro de sangre en el jardín.
Una bebé recién nacida ha sobrevivido milagrosamente tras un hecho insólito. Su madre, una joven de 23 años, la enterró en el jardín nada más dar a luz sin asistencia médica. La pequeña pasó bajo tierra seis horas hasta que fue descubierta al día siguiente. Ha sobrevivido y se encuentra a salvo. Fueron los familiares los que alertaron a las autoridades sanitarias después de ver un rastro de sangre en el jardín.
Cuando llegaron los servicios médicos, la bebé todavía estaba con el cordón umbilical. Ha ocurrido en Ghana, según avanza el diario 'Daily Mail'. Fue enterrada por la noche y la sacaron a las 11:00 horas de la mañana siguiente. Ese rastro de sangre conducía hasta el lugar en el que estaba enterrada. Cuando la sacaron de la tierra, tenía cortes y hematomas por el cuerpo.
La pequeña comenzó a mover las extremidades al ser rescatada y respiraba preocupantemente por la presión de permanecer enterrada durante seis horas. Los médicos limpiaron a la bebé y le cortaron el cordón. Sin saber con certeza si seguía con vida, comenzó a llorar. El diario citado señala que se encontraba fría y con un tono de piel 'azulado'. En Ghana, de octubre a abril, la temperatura durante la noche puede bajar hasta los 10 grados.
Fue envuelta en toallas antes de ser trasladada de inmediato a un hospital local para el reconocimiento. Las autoridades sanitarias calificaron de milagro el hecho de que siguiese con vida. La llevaron a una incubadora y recibió oxígeno. Informes posteriores señalaron que no tenía lesiones en el corazón, estómago u otro órgano. A los seis días la dieron de alta en el hospital.
Su madre fue detenida por la Policía y ahora la pequeña se encuentra a cargo de su abuela. La progenitora entró en prisión para luego ser trasladada a un centro psiquiátrico por enterrar con vida a su hija recién nacida nada más dar a luz.
La noticia recuerda a la de un bebé recién nacido que rescatado tras ser enterrado vivo en una granja de la India en noviembre de 2020. El niño fue trasladado de urgencia a un hospital para recibir tratamiento y posteriormente logró recuperarse.
Sacaron al bebé limpio y envuelto en varias mantas. El niño fue adoptado por una mujer local después de recuperarse. En India, los fetos femeninos no deseados suelen ser abortados con la ayuda de clínicas ilegales de determinación del sexo. Sin embargo, no son infrecuentes los casos de niñas recién nacidas asesinadas después de nacer.
En diciembre de 2020 una niña prematura fue encontrada enterrada en una vasija de barro en Uttar Pradesh, en India también. La bebé fue descubierta por un vecino que estaba enterrando a su propio hijo muerto. Nunca se localizó a los padres de la niña y ella fue dada en adopción.
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