TIENE UNA ESPERANZA DE VIDA DE CINCO AÑOS
La vida de Kayla Gaytán es un continuo ejemplo de superación. Un mes después de casarse con su pareja le diagnosticaron un linfoma de Hodgkin que logró superar y del cual recibió el alta médica en enero del año pasado.
Cinco meses después de haber recibido la quimioterapia, el cáncer comenzó a remitir. Kayla ganó entonces la batalla a la enfermedad. Los médicos le dijeron que no podría quedarse embarazada, por aquel entonces la pareja ya tenía dos hijos: Ethan y Harper.
Contra todo pronóstico y desafiando las leyes de la naturaleza al cabo de un mes Kayla supo que estaba embarazada, de forma natural, de cuatrillizos. El linfoma de Hodgkin es uno de los tumores con mayor tasa de curación, aproximadamente del 80%. Sin embargo, la enfermedad se vuelve más letal si hay una recaída.
En la semana 30 de embarazo Kayla descubrió que el cáncer había regresado. Los médicos le hicieron una cesárea inmediata para intentar salvar la vida de los bebés: Lillian, Victoria, Michael y Charles que ahora continúan ingresados, pero estables.
El diagnóstico en este momento es más grave para Kayla, los médicos le han dado una esperanza de vida de cinco años, pero ella está dispuesta a luchar.
Según informa Daily Mail se ha lanzado una campaña en GoFundMe para recaudar fondos con los que poder hacer frente a los gastos médicos y de 5.000 dólares se ha alcanzado la impresionante cifra de un millón de dólares.