EN SUIZA
Una madre ha dejado encerrado a su hijo de dos años dentro de su coche para irse a una discoteca de fiesta con sus compañeros de trabajo. Unas personas que pasaban por allí oyeron los llantos del bebé y avisaron a la policía.
La policía de Schaffhausen se acercó al lugar y se encontró al niño gritando. Entonces llamaron a un mecánico para que abriera el coche. Pero poco antes de que este llegara, la madre, de 25 años, apareció. La chica fue detenida por la policía y acusada de negligencia por incumplir el deber de cuidar a su hijo.