Irlanda del Norte
Londres pondrá en marcha una nueva ley para establecer un plazo para que los crímenes cometidos durante el conflicto armado en Irlanda del Norte prescriban.
El Gobierno de Londres va a impulsar una legislación con la finalidad de establecer un plazo para que los crímenes cometido por todas las partes durante el conflicto armado en Irlanda del Norteprescriban. Se trata de una medida que ha sido anunciada por el ministro británico para Irlanda del Norte, Brandon Lewis. Sus críticos la califican de "amnistía encubierta". Se aplicaría tanto a las Fuerzas Armadas británicas como a los paramilitares unionistas, protestantes, y republicanos, católicos. El proyecto de ley se tramitará en otoño. Brandon Lewis ha confesado que, aunque el asunto es "complejo", es "la mejor y única manera" de poner punto y final al legado de crímenes no resueltos del conflicto.
División en Irlanda del Norte
El anuncio de la medida ha generado opiniones dispares. Los partidos políticos principales de Irlanda del Norte, así como víctimas se han opuesto a la misma. Un grupo representante de las victimas ha dicho que las propuestas eran "una perversión del sistema de justicia penal". También desde el Partido Unionista Democrático. El líder del parlamento, Jeffrey Donaldson, ha dicho que era "totalmente inaceptable".
¿Por qué estalló el conflicto?
Fue un conflicto que enfrentó a nacionalistas católicos contra unionistas protestantes. Los primeros, luchaban por una Irlanda unida, mientras que los segundos querían que Irlanda del Norte siguiera siendo parte del Reino Unido. En total, perdieron la vida más de 3.600 personas a lo largo del conflicto.
Un nuevo organismo independiente
La nueva legislación creará un órgano independiente dedicado a busca información sobre el conflicto. De esta manera, se ayudaría a las víctimas a conocer muchos datos sobre lo que ocurrió. También estaría en proceso la iniciativa "historia oral". A través de ella, se recogerían declaraciones de afectados por el conflicto.
Lewis declaraba que la proposición de una amnistía para los presuntos responsables de los crímenes "será difícil de aceptar" para los familiares de las víctimas. Aún así, ha insistido en que es la única manera posible de cerrar de alguna manera este capítulo, ya que el sistema actual de procesamiento de casos y denuncias "no está funcionando". De hecho, el Primer Ministro británico, Boris Johnson, opinaba de manera similar, que esta legislación, que cuestionan tanto la oposición laborista como los Gobiernos de Belfast y Dublín, "pondrá un punto final" al legado de ese fatídico periodo, que se conoce en las Islas Británicas como "The Troubles" (el conflicto).