CANADÁ
Cornelius Naujoks, un ciudadano de Whitecourt, en Alberta, Canada, descubrió que tenía desde hacía nueve meses un boleto de la Lotería premiado con un millón de dólares canadienses (unos 657.000 euros).
Naujoks compró el boleto de Lotto Max en diciembre de 2017 y lo dejó encima de su escritorio. Sin embargo, el desorden era tal en su mesa que se le olvidó comprobarlo hasta pasados nueve meses.
Ahora, asegura que tiene grandes planes por delante, como comprarse una casa y quizá también un coche, según recoge el diario local Edmonton Journal.